Juventud: la juventud sin idealizar
- Gloria

- 3 nov 2022
- 1 Min. de lectura
Actualizado: 4 nov 2022
JULIA IST

Ficha Técnica

Introducción
Julia Ist es una película que nos da una mirada sincera y transparente a la juventud, y por ende a las emociones. Lejos de presentarla como la típica idealización de fiesta, amor y libertad, la presenta como lo que es: una montaña rusa de emociones. Es decir, en Julia Ist se muestra tanto las emociones buenas como las malas. Nos cuenta lo que es la juventud a través de una de las experiencias más clichés de la juventud: irse de Erasmus. Dicha experiencia bajo mi visión, es una de las mejores metáforas para entender de cerca la montaña rusa de la que hablábamos al principio. En él se experimenta desde el éxtasis hasta el desarraigo.
Reseña
En contra del arquetipo tradicional asociado a la juventud, en el que todo es diversión y felicidad, en Julia Ist nos adentramos verazmente a un mundo en el que se siente de todo.
La protagonista evoluciona desde momentos en los que se siente desarraigada hasta situaciones de puro éxtasis; cuando Julia se siente estable, seguidamente esa estabilidad tambalea; hay veces en las que Julia sabe exactamente lo que quiere, y otras que está totalmente perdida.
¿Por qué le pasa eso?
A lo largo de la película vemos una clara evolución de nuestra protagonista: Al principio se muestra tímida y tambaleante. Se acaba de sumergir en una realidad en la que no se siente a gusto. Las personas con las que comparte piso y universidad no vibran de la misma manera que ella, todo es desconocido y abrumador, y esto le hace sentir un sentimiento de desarraigo importante.
Poco a poco, Julia, bajo su propia confusión, va encontrando nuevas conexiones con las que se siente a gusto y le permiten disfrutar y subir a esa cima de felicidad de la que hablábamos anteriormente. Ve la realidad de manera sublime.
En este punto me gustaría introducir la figura del novio de Julia de Barcelona. Una relación que desde el principio del largometraje se veía apagada y sin motivaciones por parte de ninguno de los integrantes, además de con varios patrones tóxicos en ella.
Muchas de las relaciones que se tienen hoy en día, por desgracia, se construyen sobre unos cimientos malolientes que provienen de la educación afectiva y emocional que nos da la sociedad. Una educación que se basa en el ego de poseer a la otra persona para intentar tapar u ocultar el vacío existencial propio, en vez de hacerse uno mismo cargo de su vida.
Relaciones que en muchos casos suponen auténticas automutilaciones de la autoestima y la libertad propia.
En esta película no es un aspecto que destaque notablemente, pero sí que se deja ver. Como decía anteriormente, Julia y su novio no estaban en el mismo punto afectivo, sin embargo continuaron la relación por la falsa estabilidad que te proporciona tener un pilar como ese a ojos de nuestra cultura.
Alguno de los patrones tóxicos que dejan ver son: En primer lugar que no dejan la relación cuando ninguno de los dos se sienten cómodos en ella y en segundo lugar, el novio de Julia lejos de comunicarse abiertamente para expresar su disconformidad con la decisión de que esta se haya ido de Erasmus (disconformidad que en sí misma podría ser el tercer patrón tóxico), lo que hace es arroyar a Julia con acusaciones e interrogatorios para asegurarse de que ella no está haciendo nada “que rompa su relación”.
Finalmente Julia termina con el vínculo y supone en cierta medida una liberación. Hasta que conoce a otro chico y repite esos patrones tóxicos al dar por hecho que por el simple hecho de mantener relaciones sexuales y afectivas con él, este ya ha de convertirse en su vida, le debe una serie de explicaciones y tiene una serie de requisitos hacia ella, sin haber acordados ambos que así se sentían cómodos. Lo que se aprecia es una evidente falta de comunicación frente a muchos conceptos sobre la relación dados por hecho. El chico le rechaza y la vida de Julia sigue hasta que vuelve a Barcelona y vemos claramente cómo se siente en un limbo desconcertante. –Hace nada que lo dejaste con Jordi y ya estás metida en otro lio. –A ver, que no…¡No me he metido en nada! No tenemos nada, nos vemos cuando nos apetece y cada uno hace lo que quiere después. –Sólo digo que a veces uno se ve metido en algo y no se ha planteado si quería o no quería. –Eso es. No me lo he planteado ni me lo pienso plantear. Porque no se trata de eso. Se trata de que ha pasado ¡y ya está!
Autora LAVIDADEGLORIA
*Marca Registrada








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